Familia Strójwąs

STRÓJWĄS FRANCISZEK, STRÓJWĄS ANNA,STRÓJWĄS JAN, STRÓJWĄS LALKA

Al estallar la segunda guerra mundial la familia Strójwąs, compuesta por Franciszek Strójwąs, su esposa Anna y sus tres hijos (Jan de 10 años, Lalka de 6 años y Stascha de 2 años),

vivían en colonia Wladyslawowka, cerca de Wlodzimierz Wolynski. 

Eran una familia campesina muy pobre y católica muy religiosa.

En  1942, cuando Franciszek se encontraba en Wlodzimierz Wolynski, donde por orden de los alemanes, tuvo que ir a entregar papas a las autoridades locales, cuatro judíos,

que estaban buscando un lugar para esconderse, se le acercaron y le pidieron ayuda. Eran el Dr. Tuvia Lewit y su esposa Rachel y el Dr. Yitzhak Grinberg y su hermano, Grisza Grinberg.

Franciszek aceptó ayudarlos.

Los escondió en su carro y cubriéndolos con paja los llevó a su casa.

“Cuando llegamos al lugar, su esposa, sonriendo y absteniéndose de cualquier pregunta, nos dio comida “escribió Tuvia en su testimonio a Yad Vashem. 

Los Strójwąs, quienes vivían muy humildemente, hicieron lugar en el granero y armaron para ellos un pajar. 

 “Nos alimentaban al menos dos veces al día. En términos generales, compartieron una corteza de pan con nosotros. Nunca pasamos hambre. Nos dieron todo tipo de apoyo,

calidez y atención. Nos dieron alivio y esperanza, y todo se hizo desinteresadamente”, escribió Grisza en su testimonio.  

Jan y Lalka ayudaron activamente a sus padres en estos esfuerzos.

"Muchas veces, dijo Grisza, me pregunté por qué nos ayudaban. La respuesta era una sola : era gente de buen corazón ."

En  la primavera de 1942, los nacionalistas ucranianos comenzaron pogroms contra los polacos, Franciszek y su familia se vieron forzados a mudarse a Wlodzimierz Wolynski y poco

tiempo después partieron hacia lo de sus familiares en Hrubieszow.

Mientras tanto, Franciszek encontró un escondite temporario en un sótano abandonado para los refugiados y estos contactaron a Irena Ziental, que había trabajado en el mismo hospital que el Dr.Lewit. Irena colocó a los fugitivos en la casa de sus padres, donde en ese momento ya había otros judíos que estaban siendo protegidos.

Ellos eran: el Dr. Keitelman y su esposa, el Dr. Torbechko, Moshé Pekler y su esposa y el matrimonio Szraga (Efraím y Sara) con su hija Halina.

A principios de 1943 los Strójwąs intentaron regresar a su aldea y en ese ínterin, la Sra Ziental (madre de Irena) decidió partir a Hrubieszow porque recrudecieron los ataques ucranianos contra los polacos.

Aquellas personas a quienes había escondido con antelación , se contactaron con los STRÓJWĄS y les propusieron que se mudaran a la casa que la Sra Ziental iba a dejar.

Aceptaron y así se hicieron cargo, de los trece fugitivos hasta la liberación, el 20 de julio de 1944.

Mientras tanto en dos ocasiones, los nazis irrumpieron en la vivienda buscando judíos escondidos y no los encontraron.

Después de la primera irrupción, relata Halina, Franciszek dijo :” si no los encontraron, significa que están protegidos por Dios y si él los protege ,yo no los voy a abandonar.

Cumplió su palabra y nos cuidaron hasta el último minuto.”

La familia Szraga nunca perdió su contacto con ellos.

Una hermana de la Sra Strojwas ( Antonia ) vivía en Buenos Aires, ciudad donde ellos arribaron y se asentaron. Siempre se visitaban y compartieron muchos eventos familiares.

El 26 de noviembre de 1968, Yad Vashem reconoció a Franciszek Strójwąs y su esposa, Anna Strójwąs, como Justos entre las Naciones.

El 23 de diciembre de 1987, Yad Vashem reconoció a Jan Strójwąs y su hermana, Lalka Strójwąs, como Justos entre las Naciones.